"Soy bella porque lo sé": El inspirador ejemplo de la modelo con vitíligo que derribó los cánones
Cuando Winnie Harlow tenía cuatro años, los médicos le diagnosticaron vitíligo, una rara enfermedad que cambia la pigmentación de la piel. Ello le costó ser objeto de burlas y de acoso en la escuela por parte de otros niños, que la llamaban "vaca o cebra"y le lanzaban "toda clase de insultos despectivos". El acoso verbal no solo la llevó a cambiar de colegio en numerosas ocasiones y a abandonar la escuela secundaria, sino también a pensar en el suicidio.
A pesar de todas las dificultades, Winnie siempre quiso ser modelo, y no descansó hasta que debutó en el famoso programa 'America's Next Top Model', un momento que cambió su vida.
Ahora, con 23 años, es una modelo de éxito, y lo ha vuelto a demostrar esta semana con una serie de fotos de sus vacaciones en Miami que han acumulado centenares de miles de 'me gusta' y miles de comentarios de sus admiradores en Instagram.
En agosto, Winnie publicó una imagen de su figura al descubierto acompañada de un mensaje alentador, en el que revelaba el secreto de su belleza.
La verdadera diferencia, explicaba la modelo, no es su piel, sino "el hecho de que no busco mi belleza en la opinión de los otros". "Soy bella porque lo sé", aseguró Harlow.
"Me encanta, me hace única, me hace lo que soy"
Desde que Winnie Harlow sacudió la industria de la moda, cada vez son más las mujeres con vitíligo que se atreven a echar abajo los estereotipos, como las modelos estadounidenses Carlene John y Breanne Rice, o la canadiense Aiesha Robinson, por nombrar algunas.
El ejemplo de Winnie inspiró también a April Star, una niña de 12 años que ya ha formado parte de varias campañas de moda y que cuenta con unos de 120.000 seguidores en Instagram.
Otro caso reciente es el de Francesca Conti, una joven italiana de 20 años que, tras serle diagnosticado vitíligo hace seis años y enfrentarse durante años a comentarios crueles, finalmente se dio cuenta de su belleza y se convirtió en una modelo exitosa.
"Al principio, ni siquiera sabía qué era el vitíligo; mientras crecía descubrí que para mí no es un problema en absoluto. Me encanta, me hace única, me hace lo que soy", confesó la semana pasada a Daily Mail. En este sentido, la joven confiesa que decidió aceptar el vitíligo cuando descubrió "la importancia de que los demás vean que no hay ningún problema con la belleza que es diferente".