Un juzgado de Barcelona acaba de imputar a los dos primeros policías antidisturbios por las cargas policiales que tuvieron lugar durante la celebración del referéndum ilegal por la independencia de Cataluña del pasado 1 de octubre. El magistrado les imputa un delito de lesiones y otro contra la integridad moral de tres mujeres que resultaron heridas en la escuela Mediterránea de Barcelona.
El juez que lleva la causa ha solicitado a la Policía Nacional copia de las comunicaciones entre el centro de mando del operativo y los mandos de los antidisturbios sobre el terreno el 1 de octubre. Con anterioridad ya había pedido el número de placa de los agentes desplegados esa jornada, entre ellos, más de 1.100 antidisturbios, así como todos los vídeos e imágenes tanto de particulares como de medios o de cámaras de seguridad de instituciones o comercios cercanos a las zonas de las cargas. Diego Pérez de los Cobos, coronel de la Guardia Civil y designado desde el Ministerio de Interior como mando único del operativo de ese día, también deberá comparecer como testigo, como consta en el auto al que ha tenido acceso eldiario.es.
Se trata de los dos primeros antidisturbios que están siendo investigados por la presunta comisión de un delito. Tras las más de 200 denuncias recibidas por las cargas policiales en los colegios electorales el 1 de octubre, la investigación que está llevando el juez es minuciosa. Ha abierto una causa separada para cada uno de los 26 colegios donde hubo cargas policiales durante la celebración del referéndum declarado ilegal por el Tribunal Constitucional español. Este episodio mantiene abiertas otras causas judiciales, como son las que se están instruyendo contra los exmiembros del Gobierno catalán y líderes de organizaciones independentistas.