Este fin de semana, Ivanka Trump, la hija del presidente de EE.UU., se encontrará cara a cara con un alto general norcoreano durante la clausura de los Juegos Olímpicos de Invierno de Pyeongchang, informa este jueves AFP.
La asesora presidencial y mujer de negocios de 36 años encabezará la delegación estadounidense en la ceremonia final de la Olimpiada, que tendrá lugar el próximo 25 de febrero. Según representantes de la Casa Blanca, la presencia de Ivanka tiene como objetivo brindar apoyo a los deportistas estadounidenses y reafirmar la alianza entre EE.UU. y Corea del Sur.
Asimismo, en su visita de tres días a Corea del Sur, la exmodelo tiene previsto atender a una cena conjunta con el presidente del país, Moon Jae-in.
Sin embargo, lo que más expectación está generando es el evento de clausura, donde todas las miradas estarán puestas en la postura que adopte la delegación estadounidense hacia los representantes de Corea del Norte, país con el que EE.UU. está constantemente intercambiándose amenazas de guerra.
Se espera que ocho representantes de Pionyang, encabezados por el general Kim Yong-chol, un alto cargo que también se ocupa de unos asuntos internos del país norcoreano, asistan a la ceremonia. Según afirman algunos reportes, este general podría haber dirigido varios ataques contra Corea del Sur, incluido uno contra el buque Cheonan, que acabó con la vida de 46 marineros en 2010.
A pesar de poner en la lista negra al líder norcoreano, Kim Jong-un, por sus políticas nucleares, Seúl decidió aceptar la presencia de una delegación norcoreana en los Juegos en el contexto de la etapa de deshielo que se ha establecido recientemente en las relaciones entre los dos países vecinos.