Abi Tudge, de la ciudad británica de Hereford, estaban conduciendo junto con su amigo Jaz Reynolds a través de la sección de leones en el parque safari de West Midland (Reino Unido) y sus dos niños cuando, de repente, se cerraron las puertas del recinto por cuestiones de seguridad.
Según explicaron las autoridades del parque, la salida fue bloqueada temporalmente ya que algunos animales estaban demasiado cerca de la puerta, pero insistieron en que la situación no representaba ninguna amenaza para nadie.
Sin embargo, en ese momento, una manada de los leones saltó de repente "por encima" del automóvil de Abi, según contó la propia mujer, citada por la BBC.
"Estábamos tan aturdidos, intentando asegurarnos de que los niños estaban bien", recordó Abi, agregando que en aquel instante pensó en qué habría sucedido si los leones hubieran llegado más rápido y hubieran roto la ventana.
Una portavoz del parque declaró que la seguridad y el bienestar de los huéspedes es un aspecto "fundamental". La mujer explicó que el cierre temporal fue una precaución para evitar que los animales "pasaran de una puerta a la otra" y que los huéspedes que ya se encontraban en el recinto tuvieron que esperar en sus vehículos "durante un breve período", según recoge el medio.
El problema se originó como resultado de mezclar leones machos con hembras, detalló la vocera. Como ocurre con todos los animales salvajes, algunos "grupos normalmente armoniosos pueden en ocasiones volverse particularmente activos", agregó.