Los primeros artistas de las cuevas de Europa no eran humanos
Científicos de la Universidad de Southampton y del Instituto Max Planck de Antropología Evolutiva, entre otras instituciones, afirmaron que las pinturas rupestres encontradas en tres cuevas españolas habían sido realizadas por neandertales, y no por los primeros humanos modernos, informa Science.
Los trabajos de investigación fueron realizados en pinturas rojas y negras que representan animales, figuras geométricas y estarcidos, localizadas en diversas cuevas españolas como La Pasiega, Maltravieso y Ardales.
En el estudio fue empleado nuevo método de datación, llamado datación de uranio-torio, que antes había sido utilizado solo por geólogos, pero en los últimos años los arqueólogos lo emplean para obtener fechas de arte rupestre. Este método muestra que las pinturas en cuevas de España se produjeron hace no menos de 64.000 años. Hay evidencias demostradas de que los neandertales estuvieron por toda Europa durante ese periodo, pero no existe evidencia arqueológica o paleontológica que pueda apoyar la presencia de humanos modernos en Europa en esa época, sostienen.
Las pinturas estudiadas son el arte "más antiguo conocido" y "fueron creadas al menos 20.000 años antes de que los humanos modernos llegaran a Europa desde África", afirma el autor y colíder del estudio, Chris Standish, arqueólogo de la Universidad de Southampton. Por lo tanto, los científicos estiman que las mismas fueron creadas por neandertales.
El hallazgo muestra también que los neandertales tenían capacidad para el pensamiento simbólico, un rasgo cognitivo que antes se consideraba exclusivo del Homo sapiens.
"Nuestros nuevos datos muestran que los neandertales tenían pensamiento simbólico y pensaban como los humanos modernos", asegura João Zilhão, científico del Instituto Catalán de Investigación y Estudios Avanzados y de la Universidad de Barcelona en España, que participó en ambos estudios. "Al buscar los orígenes del lenguaje y las habilidades perceptivas y cognitivas humanas, tenemos que mirar hacia más atrás en nuestro pasado: más de medio millón de años", concluye.