El comandante del CENTCOM (el Mando Central de EE.UU.), Joseph Votel, afirmó al Comité de Servicios Armados de la Cámara de Representantes que EE.UU. busca contener la creciente influencia de Irán en Oriente Medio y defenderse de los desafíos que Rusia y China plantean a la hegemonía de Washington.
"Un aumento en el despliegue de los sistemas rusos de misiles tierra-aire en la región amenaza nuestras capacidades para dominar el espacio aéreo", aseguró Votel en su declaración, olvidando mencionar que, a diferencia de las fuerzas estadounidenses presentes en Siria, las fuerzas rusas están en el país por invitación de Damasco.
"La principal razón por la que estamos en Siria es para vencer al Estado Islámico, y esa sigue siendo nuestra única tarea", dijo Votel a los legisladores, sin llegar a reconocer el papel clave que tuvo Rusia en la derrota de los terroristas en el país árabe.
Hablando de Irán, el general describió a Rusia y la República Islámica como "rivales históricos" que, no obstante, comparten intereses, "entre ellos la intención dominante de marginar, si no expulsar, a EE.UU. de la región".
Además, Votel acusó a Irán de intervenir en la guerra en Yemen para dañar a su rival regional, Arabia Saudita, "presionar a la coalición liderada por Riad y expandir su esfera de influencia".
Aunque el comandante no indicó directamente que la misión de EE.UU. en Siria es contrarrestar a Irán, sí mencionó que su país debería "construir una relación sólida" con el Ejército iraquí y las Fuerzas Democráticas Sirias para impedir los objetivos de Irán mediante el establecimiento de líneas de comunicación en estas áreas críticas".