La camioneta en la que se movilizaba el candidato presidencial de izquierda, Gustavo Petro, fue atacada durante su visita a Cúcuta, ciudad fronteriza ubicada al noreste de Colombia.
Aunque en un principio se especuló que los vidrios del vehículo blindado recibieron disparos, el propio aspirante a la presidencia rebatió esa versión y aseguró que en la capital del Norte de Santander se había organizado "un sabotaje violento" contra la manifestación a favor de su candidatura, recoge El Espectador.
Petro denunció al ex alcalde de Cúcuta (2004-2007) Ramiro Suárez, como responsable de los hechos, tras acusarlo de "asesino y paramilitar". De acuerdo a su testimonio, el acto de sabotaje fue perpetrado por personas que llegaron al lugar "en siete buses".
En redes sociales circularon imágenes desde el interior de la camioneta de Petro, que mostraban el presunto impacto de objetos contundentes en los vidrios. La candidata a la Cámara de Representantes por Bogotá, María José Pizarro, dijo que el ataque había tenido como propósito "atentar contra la vida" del candidato, por lo que exigió al Estado mayores "garantías para la participación".
Según Publimetro, el suceso ocurrió a las 5:30 de la tarde en medio de una manifestación de apoyo a la candidatura del ex alcalde de Bogotá, que trató de ser dispersada por la policía de Cúcuta por motivos de "seguridad". De hecho, la tarima donde Petro tenía previsto realizar su mitin político fue desmontada por las autoridades locales.
Los seguidores de Petro denunciaron la actuación de la policía por considerarla desmedida. En videos difundidos vía Twitter se observan columnas de gas lacrimógeno mientras los adeptos del candidato permanecen en las inmediaciones del parque Santander coreando "resistencia, resistencia".