Al empatar 1-1 en la ciudad boliviana de Oruro, el conjunto futbolístico ecuatoriano logró clasificarse a la segunda fase de la Copa Sudamericana 2018, gracias a la victoria 3-2 que consiguió en el partido de ida celebrado en Quito. Sin duda, uno de los jugadores ecuatorianos que más aportaron al triunfo de su equipo fue el portero Johan Padilla, quien salvó la valla del Nacional en varias ocasiones.
Justamente, este guardameta protagonizó uno de los episodios más insólitos del futbol sudamericano de este año. Su equipo consiguió el empate a los 80 minutos del encuentro, de manera que Padilla decidió ayudar a sus compañeros y empezó a 'matar' tiempo.
Cuando faltaba un solo minuto para que finalizara el partido, el arquero tenía que hacer un saque de meta, pero se demoró demasiado. Obviamente, a propósito. Como resultado, el árbitro José Argote le mostró tarjeta amarilla por hacer tiempo.
Padilla, por su parte, ignoró por completo lo que sucedía y prosiguió acomodando el balón para el saque. Aparentemente, el juez venezolano se molestó con el ecuatoriano y lo tocó para advertirle que se apresurara.
Lo que entonces hizo el portero provocó tanto asombro como risas por parte de los espectadores y de los propios comentaristas del partido. Tras el contacto, Padilla se desplomó en el suelo, simulando, claramente, haber sido golpeado por el árbitro.