En una advertencia explícita a Taipéi y a Washington contra los movimientos separatistas, el presidente chino, Xi Jinping, ha recalcado que cualquier violación de la política de una China unificada está condenada al fracaso.
"Es una aspiración compartida por todos los chinos y que responde a sus intereses básicos de salvaguardar la soberanía e integridad territorial de China y de realizar la reunificación completa de China", ha afirmado el presidente durante un discurso en la sesión anual del Parlamento de China. "Toda acción o truco para dividir China está condenada al fracaso y afrontará la condena del pueblo y el castigo de la historia", ha añadido.
Tras subrayar que los chinos están firmemente en contra de cualquier actividad separatista en Taiwán, Xi abogó por una "reunificación pacífica" de la isla autónoma con la China continental, destacando que es "absolutamente imposible separar cualquier pulgada de territorio de nuestro gran país".
La advertencia de Pekín se produce pocos días después de que el presidente estadounidense, Donald Trump, firmara una ley que permite a los funcionarios estadounidenses "de todos los niveles" viajar a Taipéi para reunirse con sus homólogos, a los que también recibirán en Washington "en términos recíprocos". Desde 1979 los contactos entre Washington y Taipéi han sido informales.
- El principio de una China unificada es la piedra angular de la política del Gobierno chino con respecto al problema de Taiwán
- La isla de Taiwán se autogobierna, con una administración propia, desde el año 1949, cuando el general Chiang Kai-shek (1887-1975), junto con otros simpatizantes del partido nacionalista Kuomintang, huyó allí tras ser derrotado en la guerra civil con los comunistas de Mao Zedong
- Pekín considera a Taiwán una de las provincias de China. La mayoría de los países del mundo, Rusia incluida, reconocen que la isla es parte integral de la República Popular China