La Policía francesa ha abatido al hombre armado que había tomado varios rehenes en un supermercado de la cadena Super U en la localidad de Trèbes, en el departamento francés de Aude.
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, ha declarado que el país ha vivido un ataque terrorista islamista y ha confirmado que el atacante mató a tres personas y dejó 16 heridos.
El atacante ha sido identificado como Redouane Lakdim, de 26 años, de origen marroquí. Era conocido por la Policía y los servicios de inteligencia.
El hombre "entró alrededor de las 11:15 horas en un supermercado Super U y se escucharon disparos".
Se reporta que unos minutos antes de entrar en el local comercial, el mismo atacante hirió de bala a un policía en otro punto del mismo distrito de Carcasona. El agente se encontraba corriendo junto a tres compañeros cuando el individuo abrió fuego contra ellos. A continuación, el terrorista disparó a un automovilista para robarle el coche, hiriendo de gravedad al conductor y matando al pasajero, informa BFM.
Al parecer, el atacante había jurado lealtad al Estado Islámico. Los testigos afirman que el hombre gritó "Alá es grande" y "soy un soldado del Daseh [otro nombre del Estado Islámico]".
Asimismo, se reporta que el asaltante había exigido la liberación del terrorista Salah Abdeslam, el único atacante con vida que participó en los atentados de París de 2015.
El primer ministro francés, Edouard Philippe, afirmó que se trata de una "situación seria" y que la toma de rehenes "parece ser un acto terrorista".
El grupo terrorista Estado Islámico se ha atribuido la autoría del ataque.
El periodista Bruno Carvalho ve estos incidentes a una mayor escala y sostiene que los políticos europeos deben dejar de apoyar los conflictos en Oriente Medio.