Varios refugiados en París ahora visten ropa del expresidente de Francia, Jacques Chirac, después de que su hija Claude donara diversas prendas de su padre a una organización benéfica local.
Esa mujer entregó las pertenencias del antiguo mandatario el pasado invierno después de que el fotógrafo Yann Arthus-Bertrand solicitara su ayuda, ya que una monja que atiende a migrantes le había dicho a ese hombre que necesitaban ropas de abrigo.
Arthus-Bertrand escribió a la Fundación Chirac —es integrante de su junta directiva— y la propia Claude Chirac respondió: "No te preocupes, me encargaré de ello".
Días más tarde, un vehículo oficial con una escarapela tricolor suministró esa vestimenta a un equipo de voluntarios.