Un estudio publicado este miércoles en la revista científica 'Nature' revela que desde 2016 ha muerto la mitad de la fauna de la Gran Barrera de Coral en Australia, que se ha convertido en "un sistema altamente alterado y degradado".
Considerado como el arrecife de coral más grande del mundo, la Gran Barrera de Coral se extiende a lo largo de 2.600 kilómetros por la costa este de Australia. Debido a la subida de temperaturas, esta 'joya' de la naturaleza compuesto de corales está desapareciendo a pasos agigantados por culpa de lo que se conoce como "evento de blanqueamiento".
Según los científicos, el fenómeno se desencadenó después de que la Gran Barrera de Coral permaneciera cubierta por agua "peligrosamente caliente" en el verano de 2016, lo que causó estragos en grandes franjas del arrecife. Entre las especies más afectadas figuran el coral cuerno de ciervo (Acropora cervicornis) y el coral tabular.
"Uno de cada tres corales murió en nueve meses", dijo Terry Hughes, autor del artículo y director del Centro ARC de Excelencia para Estudios de Arrecifes de Coral (CEEAC). "Se podría decir que [el ecosistema] ha colapsado [...] Se ha transformado en un sistema completamente nuevo que se ve y se comporta de manera diferente, funcionando de otro modo respecto al de hace tres años", añadió Hughes.
Un único culpable: los humanos
En el verano de 2017 se registró un nuevo fenómeno de blanqueamiento, cuyo impacto todavía no ha podido ser evaluado por los expertos. Según Hughes, el principal y único culpable de esta destrucción natural es el calentamiento global causado por los humanos. El aumento de la temperatura del planeta hace que los océanos sean más cálidos, lo que afecta directamente a la vida de los corales.
El director del CEEAC se muestra poco optimista al respecto al futuro de la Gran Barrera de Coral, que podría desaparecer en cuestión de 50 o 100 años. En este sentido, el científico estadounidense ha señalado que es muy probable que los objetivos del Acuerdo Climático de París no se cumplan, sobre todo después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, expresara en junio 2017 su intención de abandonarlo.
"Los arrecifes de coral en los trópicos se degradarán durante este siglo hasta que el cambio climático se estabilice, permitiendo que las poblaciones remanentes se reorganicen en nuevos conjuntos de arrecifes tolerantes al calor", auguran el experto.