A finales de este año quedará prohibida en la Unión Europea (UE) la venta de tres pesticidas neonicotinoides que están relacionados con la disminución en la población de abejas y su labor para polinizar.
Por medio de análisis científicos la UE identificó que los pesticidas y factores como epidemias y cambios climáticos contribuyeron a la disminución de la población de estos insectos, reportó AP.
Hay pruebas de laboratorios y estudios de campo que muestran que los neonicotinoides son dañinos para las abejas
Antonia Staats, representante de la plataforma activista Avaaz, saludó la decisión al señalar que se trata de una "luz de esperanza para las abejas".
Según algunos analistas, la población de abejas ha experimentado una alarmante disminución y se temía que debido a ello se afectara la producción de cosechas. Las abejas son necesarias para propagar el polen y contribuyen a la reproducción de la flora.
Dave Goulson, profesor de biología en la Universidad de Sussex, declaró que "hay pruebas de laboratorios y estudios de campo que muestran que los neonicotinoides son dañinos para las abejas y una creciente lista de pruebas los vinculan con declives de mariposas, insectos acuáticos y pájaros que comen estos insectos. La decisión de la UE es lógica", afirmó.
Sin embargo, la decisión adoptada por el ente comunitario fue rechazada por la compañía agrocomercial suiza Syngenta. La calificó como "decepcionante" y sostuvo que hay pruebas que muestran que los neonicotinoides "representan una amenaza mínima para la salud de las abejas, en comparación a la falta de alimentos, epidemias y el tiempo frío".
Los tres pesticidas solo podrán ser usados en invernaderos, donde no hay contacto con abejas. La UE, organizaciones ambientales y la industria han discutido el tema durante casi 10 años.