Los inventos que ahorran millones de dólares a la petrolera venezolana Pdvsa
El petróleo es sin dudas la principal riqueza del Estado venezolano y su principal fuente de recursos económicos.
Según apunta la economista y académica Pascualina Curcio, "el 95% de las exportaciones de Venezuela son por concepto de petróleo", por lo que cualquier variación en los precios del crudo impacta en la economía venezolana, para bien o para mal.
En este sentido, recordó que de cada 100 dólares que ingresan a la nación, un promedio de 95 corresponden a la venta del petróleo en el mercado internacional.
De allí que parte de la crisis económica se explica en la merma de los ingresos petroleros, escribió en su blog de Telesur el economista Alfredo Serrano, al analizar el impacto de la reducción de precios del petróleo a escala mundial.
"Entre 2014 y 2015 los ingresos por la renta petrolera pasaron de 39.716 millones de dólares a 13.236 millones", mientras que en 2016 "batieron un nuevo récord a la baja: 5.291 millones", lo que, según Serrano, fue "la peor caída de la última década".
Inventos criollos
En vista de esta situación, varios trabajadores de la estatal Petróleos de Venezuela (Pdvsa) han realizado una serie de inventos que, entre otros atributos, ahorran millones de dólares a una empresa que solo en 2016 destinó 11.295 millones de dólares en 'adquisiciones de propiedades, plantas y equipos', según se desprende del Informe Financiero de ese año publicado en su sitio web.
Varios de estos "inventos" fueron dados a conocer en la exposición 'Venezuela Potencia', recientemente realizada en Caracas.
'Cabezal arturito'
El cabezal es un equipo empleado en la extracción de petróleo para profundidades de hasta 6.000 pies.
Luego de perforar el pozo del que se sacará el crudo, el cabezal se instala en la superficie de un conjunto de equipos (bomba de cavidad progresiva, tuberías, caja reductora y motor eléctrico) con los que se consigue extraer el petróleo del subsuelo.
Alfredo Sotillo, el inventor, es un técnico en petróleo y licenciado en gestión social, con 35 años de labores en Pdvsa.
Explicó que el cabezal que habitualmente se compra en el exterior tiene una vida útil de un año (algunos duran 6 meses), mientras que su invento, bautizado como 'Cabezal arturito', dura de 4 a 5 años con un solo mantenimiento en toda su vida útil.
El cabezal importado cuesta alrededor de 270.000 dólares, el 'arturito' apenas 40.000 dólares.
Sotillo ha empleado 16 años en las mejoras de su prototipo. Actualmente uno de ellos está instalado desde hace 9 meses en una zona de extracción de petróleo (bloque 8) en el oriente de Venezuela y, según sus cálculos, suministra un ahorro de 10 millones de dólares.
Sistema de anclaje
Wilfredo Salazar es un trabajador petrolero conocido entre sus compañeros como 'el Náufrago'. Tiene 28 años de experiencia como especialista en mudanzas de taladros de perforación de petróleo en aguas del Lago de Maracaibo, en el occidente de Venezuela.
Los equipos para extraer el crudo del fondo del lago son embarcaciones que deben anclarse al lecho del estuario o sostenerse mediante un sistema de boyas. Cada uno de esos sistemas tiene aspectos negativos que terminan por afectar las tareas de producción.
Así, explica Salazar que cuando hay mal tiempo "el sistema de anclaje con boyas no ofrece mucha estabilidad y las tarea se detienen", mientras que cuando la plataforma está anclada es más firme. Sin embargo, al momento de sacar el ancla, "los trabajadores quedan debajo de un peso de 20.000 libras y su movimiento pendular los pone en riesgo". Además, afecta la vida útil de los materiales, ya que "en el 90% de los casos" las guayas (cables de acero) "se parten por fatiga y corrosión".
En una maniobra de anclaje directo pueden emplearse de 72 horas a 5 días, 40 trabajadores, cuatro embarcaciones y una gabarra grúa.
'El Náufrago' es uno de los creadores de un sistema de anclaje mixto que reduce "a la mitad el tiempo de la mudanza de los taladros de perforación en el Lago, y elimina totalmente los riesgos para los obreros". El primer resultado, señala Wilfredo Salazar, es la disminución de un "50% de tiempos improductivos y el incremento de la seguridad".
Seguimiento inteligente
En 2006, Pdvsa creó un Distrito Social Tecnológico en el estado Mérida (a unos 670 kilómetros de Caracas) con la intención de superar las vulnerabilidades puestas al descubierto durante el sabotaje que padeció la empresa entre finales del año 2002 y principios del año 2003.
Allí fue desarrollada, entre otras, una aplicación capaz de supervisar y controlar "cualquier proceso productivo desde un instrumento hasta un dispositivo inteligente", indicó el ingeniero Ulianov Gil.
Se trata del Sistema de Control Supervisorio y Adquisición de Datos (SCADA PDVSA), una herramienta tecnológica, explica Gil, con la que "se inyecta inteligencia para mejorar la gestión de nuestros campos petroleros".
'SCADA' opera en diversos procesos de la llamada cadena de valor (exploración, producción, refinación y comercialización) de la producción petrolera del país. Es un 'software' venezolano creado por trabajadores de Pdvsa y que "no tiene nada que envidiarle a los sistemas privativos", agrega el ingeniero.
Un sistema similar comprado a empresas transnacionales cuesta, "como mínimo, un millón de dólares", detalla Gil. En este sentido, 'SCADA PDVSA' ha permitido un ahorro de "más de 70 millones de dólares al país y ya hemos realizado 113 implantaciones de esta tecnología", en diferentes espacios de Pdvsa, puntualizó.
En opinión del ingeniero, el sistema, además de ahorrar divisas, "genera y sistematiza nuevo conocimiento, pero también impulsa el desarrollo de tecnología propia con capacidad de exportación".
Los trabajadores entrevistados por este medio coincidieron en asegurar que han recibido ofertas de trabajo de empresas petroleras extranjeras, no obstante creen que sus aportes son importantes para Pdvsa y el país.
Ernesto J. Navarro