El excanciller alemán Gerhard Schroeder asistió a la ceremonia de investidura del presidente ruso celebrada este lunes en el Gran Palacio del Kremlin de Moscú. El expolítico la observó desde la primera fila y recibió un apretón de manos 'exclusivo' del presidente reelecto de Rusia, Vladímir Putin.
Schroeder estuvo entre los invitados de honor del evento y fue una de las tres personas a las que Putin dio la mano después de prestar juramento, junto con el primer ministro Dmitri Medvédev y el patriarca Kirill, jefe de la Iglesia ortodoxa rusa.
Durante su mandato como canciller alemán entre los años 1998 y 2005, Schroeder fue un firme defensor de estrechar los vínculos entre Alemania y Rusia, y abogó por la creación de un gasoducto submarino en el mar Báltico que conectara directamente a ambos países. Tras abandonar la política continuó su trabajo en la dirección de la empresa Nord Stream AG, que opera el oleoducto.