El Departamento del Tesoro de EE.UU. ha incluido en 'la lista negra' a seis individuos y tres entidades comerciales presuntamente asociados con el Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica.
El presidente Donald Trump anunció el 8 de mayo la salida de EE.UU. del acuerdo nuclear internacional con Irán, que en su opinión "no ha traído la paz" y "nunca lo hará". Acto seguido, proclamó el establecimiento del primer paquete de sanciones contra la República Islámica y planteó una serie de exigencias políticas a Teherán.
Poco después se informó que el Departamento del Tesoro de EE.UU. revocará las licencias de exportación expedidas a empresas del sector de la aviación civil que en algún momento establecieron negociaciones con Irán.
Trump prometió ante los miembros de su gabinete imponer "sanciones que estarán entra las más firmes que se hayan impuesto jamás contra un país".
Mediante la creciente presión a Teherán, el presidente estadounidense espera obtener un "pacto que sea efectivamente bueno para el mundo", de otra manera "no habrá ninguno". El gobernante sugirió que las autoridades iraníes comiencen a negociar bajo una incierta amenaza de que en caso opuesto "sucederá algo".
Europa expresa a Rohaní su compromiso con el acuerdo
Este jueves, la canciller alemana, Angela Merkel, llamó al presidente de Irán, Hasán Rohaní, y le expresó el compromiso de Berlín con el cumplimiento del histórico acuerdo nuclear alcanzado con Teherán en 2015.
"[Merkel] Reiteró que Alemania, así como Francia y el Reino Unido, continuarán manteniendo el acuerdo nuclear con Irán mientras ese país siga cumpliendo con sus obligaciones en virtud del acuerdo", informó el portavoz del Gobierno Federal de Alemania, Steffen Seibert.
Por su parte, el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) confirmó este miércoles que los compromisos relacionados con la energía nuclear en virtud del histórico acuerdo todavía están siendo cumplidos por Teherán.