El Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) ha elevado la alerta roja en relación al volcán Kilauea en Hawái, calificando de "inminente" su erupción volcánica con "actividad peligrosa en suelo y en aire".
Según el servicio, la erupción de cenizas del cráter Halemaumau del volcán Kilauea ha aumentado su intensidad. En Pahala, que se encuentra a unos 29 kilómetros a sotavento del volcán, se registran cenizas y contaminación volcánica en el aire. Según las observaciones, la nube volcánica alcanza en estos momentos los 3-3,6 kilómetros de altura y se desplaza al suroeste de la isla. Los expertos advierten que la actividad podría volverse más explosiva en cualquier momento.
El volcán Kilauea entró en erupción a primeros de mayo tras una serie de sismos. Sus eyecciones de lava alcanzan hasta 70 metros de altura y han obligado a la evacuación de alrededor de 2.000 personas, amenazando la integridad de decenas de inmuebles.
A causa de los movimiento de lava, los incendios, la emanación de gases tóxicos y las lluvias acidas, la población local se ha visto obligada a dejar sus hogares y a trasladarse a lugares más seguros en el suroeste de la isla.