"EE.UU. está evadiendo el Tratado sobre Misiles de Alcance Medio y Corto (INF) al desarrollar y realizar pruebas de vuelo de misiles balísticos con un alcance de vuelo de 500 a 5.000 kilómetros", denunció en un artículo para el rotativo Krásnaya Zvezdá el jefe del Centro Nacional ruso para la Reducción del Riesgo Nuclear del Ministerio de Defensa ruso, Serguéi Ryzhkov.
La parte estadounidense se justifica al insistir que este tipo de misiles "no son nada más que los blancos-cohetes balísticos y todos los trabajos de desarrollo e investigación se llevan a cabo con el fin de ensayar un sistema de defensa antimisiles global", escribió Ryzhkov.
No obstante, el funcionario hizo hincapié en que estos blancos-cohetes imitan por sus características tácticas y técnicas, especialmente en el alcance de vuelo, una amplia gama de misiles balísticos de corto y mediano alcance como Hera, MRT, Aries, LV-2, Storm, Storm-2, MRBM, cuyo uso y pruebas están prohibidos por el tratado INF firmado por la Unión Soviética y EE.UU. el 8 de diciembre de 1987 y sin fecha límite.
"Estos misiles, en efecto, son medios universales de aceleración que, dependiendo de los equipos instalados en sus ojivas, pueden ser utilizados como misiles balísticos. El desarrollo y las pruebas de los misiles de ese tipo crean un precedente de evasión del tratado INF, ya que estos misiles son capaces de transportar armas a distancias prohibidas por este tratado", afirmó el representante del Ministerio de Defensa ruso.
Otros puntos violados por EE.UU.
Las Fuerzas Armadas de EE.UU. disponen de más de 3.000 de aviones no tripulados 'pesados' como MQ-1B Predator y MQ-9A Reaper. El estatus de estos drones en el marco del tratado INF hasta el momento no se ha resuelto, pero formalmente pueden ser catalogados como misiles de crucero de base terrestre. "La fabricación, las pruebas y, en general, la existencia de tales misiles a disposición de las partes está prohibida por el tratado INF", subrayó Ryzhkov.
Asimismo, el Ministerio de Defensa ruso considera un incumplimiento del tratado INF el despliegue en las bases de defensa antimisiles de EE.UU. en Europa de plataformas de lanzamiento idénticas a las Mk-41, las cuales utiliza la Armada de EE.UU. para lanzar misiles de crucero de alcance medio.
"Por ejemplo, en las instalaciones de defensa antimisiles de EE.UU. en Rumanía, contraviniendo las disposiciones del tratado INF, se han desplegado (y en Polonia está planeado su despliegue) plataformas de lanzamiento universales, ensayadas no solo para el lanzamiento de misiles de defensa antiaérea tipo SM-3, sino también de misiles de crucero de medio alcance BGM-109 Tomahawk. Con ello, los misiles de crucero basadas en el mar BGM-109 Tomahawk se convierten en misiles de base en tierra, lo que viola directamente las disposiciones de los artículos 7 y 8 del tratado INF", denunció Ryzhkov.
Otra violación flagrante del tratado INF, serían las pruebas de lanzamiento desde plataformas terrestres Mk-41 del misil de crucero de base aérea AGM-158V (JASSM-ER), cuyo alcance de vuelo es de 1.000 km, realizadas por el Pentágono en los años 2012-2013.
"EE.UU. intenta desacreditar a Rusia"
Ryzhkov recordó que en diciembre de 2017 el presidente de EE.UU., Donald Trump, firmó un proyecto de ley para la defensa, que entre otras cosas contiene un programa con un presupuesto de 25 millones de dólares para el desarrollo de un nuevo misil de crucero cuyo uso bajo los términos del tratado INF está prohibido.
Al mismo tiempo, EE.UU. declaró en varias ocasiones que tiene información de que Rusia, supuestamente, posee armas prohibidas por el tratado INF.
"Las reclamaciones de EE.UU. van acorde con la tendencia general de la política antirrusa y tienen como objetivo crear una opinión pública sobre el desprecio al tratado INF por parte de Rusia. Haciendo esto, EE.UU. está creando un fondo exculpatorio para sus acciones que de violación de este tratado", explicó Ryzhkov. Además, otro objetivo de esta política es tratar de "desacreditar a Rusia y presentarla como un Estado que viola los tratados internacionales", agregó.
"La parte estadounidense hace caso omiso a todas nuestras propuestas para un arreglo diplomático del problema existente con el cumplimiento del tratado INF", enfatizó Ryzhkov. Con ello, Washington "está llevando el tratado INF hacia el colapso", porque les impide la realización de sus planes, insistió.
Al mismo tiempo, subrayó que este tratado "es de fundamental importancia no solo para Rusia y Europa".
"En caso de que se anule, corremos el riesgo de vivir la situación de principios de 1980, cuando los misiles nucleares podían alcanzar sus objetivos en entre cinco y siete minutos, y esto creaba una situación militar y política extremadamente inestable en el continente europeo. Obviamente, los estadounidenses están equivocados al creer erróneamente que no se verán afectados", resumió Ryzhkov.