En Brasil, las protestas que desde hace tres días protagoniza el gremio de los camioneros en contra del alza en los precios del combustible diésel han provocado escasez de gasolina, alimentos y otros insumos, informa UOL. Debido a las dificultades de movilidad y transporte, algunas industrias y servicios públicos han frenado su ritmo de trabajo y pronostican serias pérdidas económicas.