Rusia considera infundadas las acusaciones en su contra por el derribo del MH17, ha anunciado el Ministerio de Exteriores ruso. La Cancillería ha hecho esta declaración después de que el Equipo de Investigación Conjunto (JIT, por sus siglas en inglés), que investiga la tragedia, afirmara que el sistema de misiles Buk con el que fue derribado el avión pertenecía a las Fuerzas Armadas rusas.
La versión de los investigadores internacionales no está corroborada con pruebas y "da pena", ha afirmado el ministerio.
"Es un claro ejemplo de acusaciones infundadas con el fin de desacreditar a nuestro país ante la comunidad internacional", ha agregado el organismo en un comunicado.
Moscú ha denunciado en numerosas ocasiones el carácter parcial de la investigación cuyas conclusiones se basan principalmente en datos presentados por el Gobierno de Ucrania. El ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, señaló en abril de este año que Moscú respeta la independencia del JIT, aunque criticó que los hechos y los materiales proporcionados por Rusia son utilizados por el grupo de manera selectiva y a veces no se tienen en cuenta del todo.
En concreto, los experimentos realizados por el consorcio armamentístico Almaz-Antéi, fabricante de los Buk, confirman que el Boeing fue derribado desde territorio controlado por el Ejército ucraniano.
- El 17 de julio de 2014 un avión MH17 de Malaysia Airlines con 298 personas a bordo fue derribado en la parte suroriental de Ucrania, donde se registraban combates entre el Ejército de ese país y las autodefensas. Todos los pasajeros y los tripulantes fallecieron.