Un tercer flujo de lava del volcán Kilauea se ha dirigido hacia la costa, cortando las vías de escape para los residentes de varias comunidades de Hawái. La situación ha obligado a los Cuerpos de la Armada de EE.UU. a ensayar la posibilidad de evacuar a los vecinos tan pronto como la lava o grandes bombas volcánicas bloqueen el último camino de evacuación por tierra.
Según informa Reuters, seis enormes fisuras del cráter en erupción enviaron ríos de lava a través del terreno, ya devastado por otros efectos de la erupción.