Unos dos meses después de que se desatara una crisis diplomática con Rusia sin precedentes en medio de las acusaciones contra Moscú por su supuesta involucración en el caso Skripal, el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, ha llamado al cese de "los ataques antirrusos".
"Tenemos que reconectar con Rusia"
En una reunión en Bruselas este jueves, Juncker ha señalado que es hora de reanudar los lazos con Rusia, dada la importancia que tienen estos para la Unión Europea. "Creo que tenemos que reconectar con Rusia", ha comentado.
"No estoy muy contento con el estado de nuestras relaciones. Nunca aceptaremos lo que Rusia hizo con Crimea o con el este de Ucrania. Sin embargo, debemos tener en cuenta que todo el territorio de la Unión Europea tiene aproximadamente 5,5 millones de kilómetros cuadrados, y Rusia, 70,5 millones", ha señalado el político, citado por The Guardian.
"Así que tenemos que volver a las —no diría normales— relaciones con Rusia, porque existen tantas áreas, tantas esferas donde podemos cooperar con más eficacia, como la investigación, la innovación y otros, sin olvidar cuáles son nuestras diferencias y divergencias. Pero los ataques antirrusos deben llegar a su fin", ha destacado el jefe de la Comisión Europea.
Lista de acusaciones infundadas
A mediados de mayo, dos organizaciones políticas italianas, el Movimiento 5 Estrellas y el partido nacionalista Liga Norte, divulgaron un programa político conjunto en el que pedían al levantamiento inmediato de las sanciones que Bruselas había impuesto contra Moscú después de que Crimea se integrara en Rusia en 2014.
Aparte del referéndum en Crimea, la comunidad internacional tiene varios 'causas pendientes' contra Rusia. El 25 de mayo, Australia y Países Bajos acusaron a Moscú de haber participado en el derribo del avión MH17 en Ucrania. El Ministerio de Exteriores ruso calificó este hecho de "claro ejemplo de acusaciones infundadas con el fin de desacreditar a Rusia".
Rusia también se ve obligada a defenderse ante las acusaciones de Londres, apoyadas por un número de naciones occidentales, de haber envenenado al exagente doble Serguéi Skripal y su hija Yulia en la ciudad británica de Salisbury. El 29 de mayo, el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, afirmó que "el caso Skripal se está desmoronando ante nuestros ojos por la ausencia de ningún tipo de prueba o de confirmación".
El catedrático de Economía Aplicada de la Universidad de Sevilla, Juan López Torres, cree que efecto de una guerra comercial entre la UE y EE.UU. es impredecible.