Unos 614 gigabytes de un proyecto secreto de la Armada de EE.UU. fueron robados por piratas informáticos chinos a un contratista, que mantuvo los datos sin clasificar a pesar de la sensibilidad de la información, que incluye el plan del Pentágono para un misil supersónico, informan fuentes de The Washington Post.
De acuerdo con el diario, las sustracciones, que podrían asestar un duro golpe al intento del Ejército estadounidense de dominar las aguas cerca de las islas en disputa en el mar de China Meridional, se produjeron al menos dos veces en enero y febrero de este año.
Según el informe, los 'hackers' que trabajan para la agencia estatal de inteligencia china obtuvieron acceso al proyecto 'Sea Dragon', que incluye información de las señales y datos de sensores, así como de radio de los submarinos. Estos datos pueden proporcionar una visión valiosa de la distancia desde que los submarinos estadounidenses pueden detectar a sus adversarios chinos.
Según los investigadores, los agentes del Ministerio de Seguridad del Estado chino también obtuvieron una biblioteca de la unidad de desarrollo de submarinos, que ofrece una visión de cientos de sistemas mecánicos y de 'software' utilizados por la Armada de EE.UU.
Entre los datos incautados también figuran los planes de la Armada de EE.UU. de montar un misil supersónico antibuque en un submarino. No obstante, el diario no ha proporcionado ninguna información específica sobre el proyecto, diciendo que la Armada le pidió que no airee los detalles del informe, para no dañar aún más la seguridad de EE.UU.