El presidente de EE.UU., Donald Trump, ha llegado a Singapur para tomar parte en la cumbre con el líder norcoreano, Kim Jong-un, que se llevará a cabo el 12 de junio. El avión del mandatario, que viajó a Singapur directamente desde Canadá, donde asistió a la cumbre del G-7, ha aterrizado en la base aérea de Paya Lebar.
La histórica reunión de los dos líderes se llevará a cabo en el lujoso hotel Capella de la isla de Sentosa. El ministro de Relaciones Exteriores de Singapur, Vivian Balakrishna, aseguró que todo está preparado para la cumbre. "Los estadounidenses y los norcoreanos están satisfechos con los arreglos, estamos listos para comenzar", indicó Balakrishna.
La delegación norcoreana, encabezada por Kim Jong-un, también ha llegado ya a Singapur. El líder del país asiático se ha reunido con el primer ministro de Singapur, Lee Hsien Loong, y le agradeció "sus sinceros esfuerzos" para preparar "la histórica cumbre".
Antes de salir rumbo a Singapur desde Canadá, Trump aseguró que va a saber "desde el primer minuto" si Kim habla en serio sobre la paz en la península de Corea, y si se da cuenta de que la cumbre no funciona no estará dispuesto a perder el tiempo.
El costo de la organización de la cumbre entre los dos países será de unos 20 millones de dólares, dijo Lee Hsien Loong, quien aseguró que su país está dispuesto a pagar este monto, ya que cree que esta reunión es importante y contribuirá al establecimiento de la seguridad y la estabilidad en la región. Casi la mitad del monto corresponde a gastos de seguridad.
Cerca de 2.500 periodistas han acudido a Singapur para cubrir la histórica reunión entre Donald Trump y Kim Jong-un. Además, cerca de 5.000 policías y personal de emergencia están de servicio durante la cumbre.