Los cárteles del narcotráfico de México tienen presencia en al menos 50 países de América, Europa, África y Asia, según informes oficiales de México y EE.UU., recogidos por El Universal.
El Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) son los que más fuerza tienen. El primero, según un reporte del Servicio Legislativo de Investigación del Congreso de EE.UU., tiene ingresos anuales que rondan los 3.000 millones de dólares gracias a sus transacciones en África Occidental, Sureste Asiático, América y Europa.
Mientras, el CJNG distribuye cocaína y metanfetaminas a lo largo de 10.000 kilómetros de la costa del Pacífico.
Negocios en Dubái
El Centro para Estudios Avanzados de Defensa (C4ADS), con sede en Washington, publicó un informe, titulado 'Sandcastles-Tracing Sanctions Evasion Through Dubai's Luxury Real Estate Market' (Castillos de arena: seguimiento de la evasión a través del mercado inmobiliario de lujo de Dubái), en el que menciona las inversiones hechas por cabecillas del narcotráfico mexicano en los Emiratos Árabes Unidos.
Se trata de Hassein Eduardo Figueroa Gómez y su padre, Ezio Benjamín Figueroa Vázquez. Ambos fueron sancionados por el Departamento del Tesoro de EE.UU. en abril de 2012 en virtud de la Ley Kingpin por ser los responsables de traficar toneladas de precursores químicos de Europa y África a México para ser usados por las organizaciones del narcotráfico en su país en la fabricación de metanfetamina que terminaría en suelo estadounidense.
Ezio Benjamín Figueroa Vázquez fue arrestado por las autoridades mexicanas y actualmente se encuentra en una prisión estadounidense; pero pese a ello —dice el informe del C4ADS—, "Figueroa Gómez (hijo) ha aprovechado a Dubái como base para continuar sus actividades comerciales".
Según los datos revelados en el informe, Figueroa Gómez ha invertido más de 4.300 millones de dólares en inmuebles de lujo en Dubái. Además, llegó a tener operativas siete empresas en los Emiratos Árabes Unidos y Chipre.