El Gobierno de Uganda ha establecido un impuesto sobre el uso de medios sociales con el fin de obtener más ingresos, aunque las personas que se oponen a esa tasa aseguran que su objetivo es sofocar las críticas contra el presidente del país, Yoweri Museveni, informa Reuters.
De este modo, los usuarios tendrán que pagar 200 chelines diarios —unos 20 dólares al año— para acceder a los servicios que ofrecen compañías como Facebook, Twitter o WhatsApp. En ese país africano, el producto interior bruto 'per cápita' rondó los 615 dólares en 2016, según cifras del Banco Mundial.
Entre las personas que han denunciado esta medida se encuentra Nicholas Opiyo, un abogado de Kampala, quien considera que se trata de "una nueva herramienta para sofocar la libertad de expresión y la organización ciudadana que no controla el Estado".
Si nada cambia, esta nueva normativa entrará en vigor el próximo julio.