El director de la corporación espacial estatal rusa, Roscosmos, reveló sus planes de poner fin a la producción del principal cohete portador ruso, el Protón, y comenzar a construir un cohete de la última generación.
"La tarea es la siguiente: producir el número necesario de nuestros legendarios Protones de acuerdo con los contratos ya firmados, y luego cerrar este proyecto y continuar utilizando exclusivamente el [cohete] Angará", dijo Dmitri Rogozin, citado por RIA Novosti.
El alto cargo destacó que el Protón cumplió ya su función histórica y ha llegado la hora de proceder a la producción de los misiles de nueva generación.
El vehículo de lanzamiento original Protón fue desarrollado a fines de la década de 1960, pero actualmente Rusia usa una versión del cohete Protón-M mucho más avanzada. El precio de un lanzamiento de este aparato se estima en alrededor de 70 millones de dólares.
El mejor motor 'limpio' del mundo
Los trabajos del proyecto Angará comenzaron a principios de la década de 1990 y el primer lanzamiento de prueba del modelo A5 más reciente, destinado a reemplazar a los Protones, se llevó a cabo con éxito en 2014.
Los expertos describen el motor RD-191 de los Angará como el mejor motor 'limpio' del mundo que usa queroseno y oxígeno como combustible. Según el Centro Estatal de Producción e Investigación Espacial Jrúnichev, el principal productor ruso de cohetes espaciales, el motor puede usarse hasta 10 veces o más, lo que crea una oportunidad para elaborar cohetes portadores reutilizables de clase Angará.
Rogozin todavía no reveló la fecha en la que está programado el cambio a los nuevos aparatos de lanzamiento, explicando que sería posible discutir los detalles cuando el Centro Jrúnichev finalice el traslado a Omsk de la producción principal, que actualmente se lleva a cabo en Moscú.