Un equipo internacional de científicos ha creado varios embriones híbridos de rinocerontes como parte de un intento para rescatar al rinoceronte blanco del norte, víctima de la caza furtiva y uno de los mamíferos más amenazados del planeta. El resultado de su investigación ha sido publicado en la revista Nature Communications este 4 de julio.
Los embriones, que ahora han sido congelados, contienen ADN de rinocerontes blancos del norte y de rinocerontes blancos del sur (una subespecie cercana). Los científicos tienen planeado implantarlos en animales vivos para que después de 16 meses de embarazo puedan dar a luz a unas crías híbridas.
Las únicas hembras vivas de rinoceronte blanco del norte, 'Najin' y 'Fatu', viven en la reserva keniana de Ol Pejeta y son la hija y la nieta de 'Sudán', el último macho de rinoceronte blanco del norte, que murió el pasado marzo en el mismo parque natural a los 45 años de edad, pero sus cuidadores lograron conservar su esperma.
'Najin' tiene lesiones en las patas que le dificultan quedar embarazada y 'Fatu' tiene problemas de fertilidad que impiden que los embriones se implanten en el útero. Por ello, los embriones se implantarán en las hembras de rinoceronte blanco del sur, pero si nacen las crías serán 'Najin' y 'Fatu' quienes estarán a su cargo.
Para alcanzar la pureza genética del rinoceronte blanco del norte se debe pasar por varias etapas de reproducción, y supone muchos riesgos y unas altas probabilidades de fracaso. Sin embargo, los investigadores están entusiasmados con haber concluido "la primera etapa esencial para salvar a esta subespecie".