Xiaomi y Huawei estarían vendiendo teléfonos baratos que espían y roban datos de sus usuarios

Vender móviles económicos para atraer compradores, pero a costa de su información personal, es una estrategia que ha funcionado en países que carecen de estrictas leyes en cuestión de privacidad.

Un informe publicado por The Washington Post esta semana asegura que decenas de fabricantes de móviles, entre ellos los chinos Xiaomi y Huawei y la estadounidense Blu, estarían espiando y comercializado los datos de sus usuarios sin el debido consentimiento.

Según el análisis, estas marcas trabajan en convenio con compañías de publicidad para dispositivos móviles como la taiwanesa GMobil, quien mediante la preinstalación de un 'software', principalmente en dispositivos de gama baja, es capaz de acceder a diferentes códigos (como el número IMEI y la dirección MAC). 

Por su parte, Xiaomi y Huawei han negado tales nexos y GMobil afirma que no es responsable de ninguna actividad maliciosa o ilegal.

La empresa de seguridad Upstream Systems, que identificó la actividad de Gmobil, señala que su objetivo es hacerse con datos muy específicos, como la ubicación geográfica, y enviar al usuario publicidad personalizada. A cambio de la información, GMobil les ofrece a los fabricantes actualizaciones de 'software' y 'firmware' gratis. 

Upstream Systems prevé que la taiwanesa se ha asociado con más de 100 fabricantes de teléfonos inteligentes y tiene presencia en casi 2.000 modelos de teléfonos inteligentes Android y más de 150 millones de usuarios en países como India, Brasil, Pakistán, Vietnam y la propia China. 

Vender 'smartphones' baratos para atraer compradores, pero a costa de su información personal, es una estrategia que funciona, sobre todo, en naciones que carecen de estrictas leyes en cuestión de privacidad.