Marcelo Alvarado, presunta víctima de abuso sexual por parte del sacerdote César Cordero Moscoso, falleció este jueves en Cuenca, Ecuador, mientras ofrecía una entrevista sobre el caso.
Alvarado se encontraba en un estudio de la radio local El Observador este 12 de julio, día, además, de su cumpleaños número 64, para hablar sobre los presuntos delitos sexuales cometidos por Cordero contra él y otros cinco denunciantes cuando eran niños y adolescentes, en uno de los planteles que administraba el religioso.
A los 20 minutos de iniciada la entrevista, el periodista Jaime Cedillo le preguntó qué esperaba de las investigaciones y si pensaba en un eventual resarcimiento por parte del acusado", pero, en lugar de responder, Alvarado "agachó la cabeza, dijo 'me siento mal' y ya no reaccionó", informó luego el comunicador, citado por el diario Extra.
Cedillo explicó que su entrevistado había "muerto en el instante". Luego se comprobó que falleció producto de un accidente cerebrovascular.
Disculpen al cura
En abril pasado salieron a la luz presuntos abusos sexuales contra niños cometidos hace más de 50 años por el cura Cordero, actualmente de 92 años y reconocido por haber fundado, además de centros educativos particulares, la Universidad Católica de Cuenca, el canal de televisión Telecuenca, radio Ondas Cañaris y el Hospital Universitario Católico.
El primero en denunciarlo fue Jorge Palacios y a él se le unieron otras presuntas cinco víctimas, entre ellos Alvarado, quien confesó públicamente que fue abusado entre los 7 y 10 años de edad por el sacerdote.
El caso tomó aun mayor notoriedad cuando fue retirado un monumento al cura Cordero, que estaba ubicado en la Universidad Católica de la ciudad de Cuenca.
Como parte del proceso judicial y religioso, la arquidiócesis de Cuenca ofreció ayuda psicológica a las víctimas y para ello designó a una profesional.
Las víctimas se quejaron, luego, de que la psicóloga los habría inducido a que disculparan a Cordero, a lo cual se negaron todos, según relata el diario El Universo.
Este caso de abusos se halla actualmente en investigación, a cargo de la Fiscalía de Cuenca y de la propia Arquidiócesis.