Las divergencias políticas internas en EE.UU. socavan la normalización de las relaciones con Rusia, ha declarado el presidente estadounidense, Donald Trump, en una rueda de prensa conjunta con la primera ministra británica Theresa May.
"Creo que nos hace mucho daño lo que llamaría una caza de brujas […], creo que realmente daña a nuestro país, y realmente daña nuestra relación con Rusia", ha dicho Trump refiriéndose a la investigación de Robert Mueller sobre la supuesta injerencia rusa en las elecciones presidenciales de EE.UU. de 2016.
Comentando la agenda de la reunión con Putin, que se celebrará el próximo lunes 16 de julio en Helsinki (Finlandia), Trump ha precisado que van a debatir sobre Ucrania, Siria y "otras partes de Oriente Medio", así como sobre la proliferación nuclear.
Al mismo tiempo, el presidente nortemaricano opina que Washington ha sido "extremadamente duro" con Rusia, mencionando, como ejemplo, los 60 diplomáticos rusos que fueron expulsados de su país como consecuencia del caso Skripal. No obstante, ha señalado que si pudieran "desarrollar una relación", esto sería positivo tanto para Rusia como para EE.UU. "Si nos llevamos bien con China y Rusia, va a ser algo bueno, no algo malo", ha añadido el mandatario.
La relación entre el Reino Unido y EE.UU. "está en el nivel más alto de especial"
Hablando sobre las relaciones entre EE.UU. y el Reino Unido, tanto Trump como May han apostado por calmar las tensiones. Trump ha expresado tener mucho respeto por su anfitriona y ha asegurado que ambos países están muy unidos con su Administración. "Daría a nuestra relación el nivel más alto de especial", ha señalado.
El mandatario ha agregado que los británicos son "un pueblo muy especial" y ha recordado que su madre nació en Escocia, una de las razones por las que valora especialmente esta relación bilateral.