La ola de violencia desatada por el crimen organizado en México ha derivado en la formación nuevos grupos de autodefensas en el estado de Morelos, distrito donde nunca antes habían surgido organizaciones comunitarias armadas, informa El Universal.
Según repasa aquel medio local, los vecinos afectados por el delito han decidido unirse en armas ante el abandono estatal, con el objetivo de afrontar de forma directa a los delincuentes. Así las cosas, al menos 30 localidades de los estados de Guerrero, Michoacán —que fue el primero en presentar esta reacción en 2013—, Tabasco y ahora también Morelos, cuentan con ciudadanos que conforman sus propias fuerzas de seguridad al margen de los gobiernos zonales y la Administración del presidente Enrique Peña Nieto.
Respuesta armada en Morelos
La situación de Morelos es crítica. Recientemente, el municipio de Totolapan registró reiterados delitos de extorsión por parte de criminales que exigían 200.000 pesos (casi 11.000 dólares) para permitir trabajar a cada base de mototaxis existente en esa región. "¿Qué no entiendes? No estamos jugando, cabrón. Aquí está este número, al ratito me comunico contigo", amenazaron a un conductor de este medio de transporte interceptado por un delincuente en motocicleta, según el diario mexicano.
La situación fue comentada entre otros colegas conductores de la zona, que rápidamente convocaron una asamblea de la que nació un modelo de vigilancia vecinal, el primero de Morelos, que comenzó a operar en julio. En el municipio de Ayala la reacción civil fue similar. La creación de las fuerzas armadas vecinales surgió en respuesta al secuestro de tres miembros de una familia ocurrido el 24 de ese mismo mes. Uno de los secuestrados, de 22 años de edad, fue hallado sin vida.
Sobre este telón de fondo, situaciones similares se vienen registrando en los municipios de Tlayacapan, Tlalnepantla, Yautepec, Ocuituco, Zacualpan, Temoac, Jantetelco y Tetela de Volcán, donde los habitantes están dispuestos a empuñar las armas. En este último territorio fue linchado esta semana un colombiano que portaba 80.000 pesos (4.320 dólares) que, supuestamente, obtuvo de extorsiones.
Crisis de Guerrero
El diario recuerda que en el estado de Guerrero se despliegan desde hace cuatro años 19 grupos armados, denominados autodefensas, que operan en 40 de los 81 municipios totales. La violencia alcanza altos niveles en localidades como Acapulco, Chilapa, Zihuatanejo y Chilpancingo.
El origen de estos grupos en aquel estado se remonta al año 2014, cuando ciudadanos con armas de bajo calibre y machetes instalaron guardias en una carretera cercana a los pueblos de Ayutla y Tecuanapa, con el argumento de detener a los criminales más buscados de la zona. Aquel conjunto se llamó Unión de los Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), pero luego se dividió por diferencias internas, lo que derivó en el nacimiento al Frente Unido para la Seguridad y el Desarrollo del Estado de Guerrero (FUSDEG).
Un año después, un comando de 500 hombres se introdujo en la localidad de Chilapa, donde secuestraron a 16 jóvenes, que aún permanecen desaparecidos, después de lo cual se formó en ese lugar la Policía Comunitaria por la Paz y la Justicia. Además, en 2017 surgieron grupos de autodefensas en San Miguel de Totolapan, que fueron desarmados por las fuerzas del Estado mexicano en mayo de ese mismo año.