Este otoño, el Ejército de Tierra de Estados Unidos recibirá "varios" camiones blindados con diferentes equipos de interferencia de radio para probar nuevas tácticas y, si es necesario, desplegar esos vehículos en el extranjero durante una crisis, informa el portal especializado Breaking Defense.
De momento, las autoridades militares norteamericanas no están dispuestas a detallar ni el número exacto ni las capacidades de esos vehículos tácticos de guerra electrónica (EWTV, por sus siglas en inglés), pero sí queda claro que se trata de un paso para reconstruir la capacidad del Ejército de EE.UU. para interferir las comunicaciones de enemigos potenciales con el equipo electrónico más avanzado.
Así, el blindado International MaxxPro incluye el sistema Crew Duke, desarrollado por la compañía SRC y mejorado con diversas modificaciones para detectar y 'apagar' las comunicaciones enemigas —desde teléfonos móviles hasta redes de control de drones— en un amplio rango de frecuencias y hasta engañar al transmitir su señal de radio.
Sin embargo, esta unidad es capaz de llevar una carga útil que ronda los 4.500 kilogramos, significativamente inferior a los vehículos del tamaño de un camión en que Rusia monta algunos de sus sistemas de guerra electrónica —como los Krasuja—, cuyo rangos de acción alcanzan cientos de kilómetros.
Sam Bendett, especialista en la materia, explica que "la movilidad resulta clave en la guerra electrónica" y destaca que "las fuerzas de Rusia poseen una amplia variedad" de esos sistemas que se desplazan mediante ruedas y "podrían desplegarse en tan solo 15 minutos", como ya ha demostrado "ampliamente en Siria, así como en un diferentes maniobras y ejercicios nacionales e internacionales".