La Policía descubrió la semana pasada en la ciudad estadounidense de San Luis un túnel bajo un local de KFC que, supuestamente, era utilizado para traficar drogas entre el noroeste de México y el estado de Arizona, informaron este jueves medios locales.
El paso subterráneo, de alrededor de siete metros de profundidad y apenas 8 centímetros de diámetro, tiene una extensión de 180 metros de largo, según indicaron las autoridades, y conecta una casa de la localidad mexicana de San Luis Río Colorado, en Sonora, con el local de comida rápida en San Luis.
El túnel fue descubierto después de que la policía local de EE.UU. detuviera el pasado 13 de agosto a un hombre con un camión cargado de drogas, entre las que había 118 kilos de metanfetamina, 19 de heroína y seis de cocaína. Aparentemente, los contrabandistas utilizaban una cuerda para hacer pasar las sustancias ilegales a través del túnel. La investigación sigue en curso.