Una madre depravada y su amante han sido condenados en Reino Unido a más de 20 años de prisión cada uno por perpetrar abusos sexuales durante meses y "planear meticulosamente" violar a su hijo bebé y a su hija de cinco años, según trascendió en el Tribunal de la Corona de Portsmouth.
La pareja de treinteañeros perpetró un abuso sexual "sistemático" contra los dos menores durante un período de cuatro meses. En determinado momento, la madre alimentó por la fuerza a su hija con una pastilla para dormir para que pudiera llevarse a cabo el abuso.
El novio secreto de la madre tenía una "predilección sexual pervertida" por los niños "de edad más joven", y los dos planearon los crímenes contra los menores en una serie de 12.400 mensajes de WhatsApp, recogen medios locales.
"Abuso sexual sistemático, rutinario y regular"
El abuso salió a la luz cuando la pareja de la madre, que no estaba involucrado, vio los mensajes en su teléfono y llamó a la Policía, que descubrió allí fotografías indecentes enfermizas, explicó a la corte el fiscal Simon Jones.
"Esto fue un abuso sexual sistemático, rutinario y regular", afirmó el fiscal, según el cual la pareja incluso había intentado infructuosamente violar a la niña después de drogarla.
Durante el juicio, que duró varias semanas, la madre afirmó que estaba mentalmente enferma y dirigida por su amante, mientras que éste negó haber llevado a cabo el abuso.
El juez Timothy Mousley dictaminó encarcelar a la madre por 22 años y a su amante por 25 años con una prórroga de tres años por considerar que suponía peligro para la sociedad.
"Se hicieron intentos infructuosos de violar a la niña después de drogarla", subrayó el magistrado, advirtiendo también que las violaciones planeadas por la pareja "habrían comenzado en cuestión de días si no se hubiera encontrado el teléfono".