Las autoridades de Wiesbaden (Hesse, Alemania) han retirado del centro de su ciudad una estatua dorada de cuatro metros que representaba al presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, depués de recibir numerosas protestas de sus habitantes.
Durante la madrugada de este 29 de agosto, bomberos de esa localidad se llevaron con una grúa la efigie, colocada dos días antes como la parte de una bienal de arte cuyo lema de este año es 'Malas noticias'.
En las horas previas, seguidores y opositores del mandatario turco se reunieron en torno a la escultura y protagonizaron altercados verbales, aunque un portavoz de la Policía indicó que había "una atmósfera agresiva" y "se descubrieron armas blancas".
La imagen representaba a Erdogan con el brazo derecho levantado —como la estatua del que fue presidente de Irak, Saddam Hussein, que derribaron en Bagdad— y fue rápidamente vandalizada con textos como "Hitler turco".
El alcalde de Wiesbaden, Sven Gerich, decidió retirar la estatua porque "ya no se podía garantizar la seguridad", según tuitearon las autoridades de la ciudad en su cuenta oficial.
Uwe Eric Laufenberg, director artístico del Teatro de Wiesbaden, explicó que erigieron la estatua para que se dialogara sobre "la figura de Erdogan", debido a que "en una democracia debemos tolerar todo tipo de opiniones".