Kevin Wallin, un sacerdote católico de Connecticut (EE.UU.) que supuestamente dirigía una red de metanfetaminas, regresó a prisión el jueves por fallar en una prueba de drogas mientras se encontraba en libertad supervisada.
Los oficiales de libertad condicional dijeron que Wallin dio positivo en la prueba de metanfetamina a principios de este mes. Fue sentenciado a pasar nueve meses en la cárcel. Cumplirá su condena en la prisión federal de Danbury, informó la cadena NBC.
Wallin, condenado a cinco años de prisión en 2015, había sido liberado dos años después y gozaba de libertad condicional