EE.UU. ha incluido en su lista de sanciones a 33 oficiales y compañías pertenecientes al complejo militar industrial de Rusia y a la inteligencia del país. Así lo ha anunciado este jueves un representante de la Administración del presidente de EE.UU.
Según el representante, el Secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, anunció la incorporación a la lista de 33 individuos y compañías que "actúan en interés de los sectores militares y de inteligencia de Rusia" en el marco de la ley CAATSA (Ley para Contrarrestar a los Adversarios a través de Sanciones).
La presunta injerencia rusa
Entre las empresas sancionadas figuran la Agencia de Investigación de Internet, compañía acusada de usar cuentas falsas en redes sociales para influir en las elecciones presidenciales de 2016. El empresario ruso Yevgueni Prigozhin se encuentra entre los sancionados por supuestos vínculos con dicha agencia. El Grupo Wagner, una empresa militar privada, también ha sido incluido en la lista.
Por su parte, el Departamento de Estado de EE.UU. ha anunciado que "seguirá aplicando sanciones contra Rusia en el marco de la ley CAATSA".
El grupo de los ciudadanos rusos a los que se aplicará la nueva ronda de sanciones incluye a personas acusadas en el marco de la investigación del fiscal especial Robert Mueller sobre la presunta injerencia rusa en las elecciones presidenciales de EE.UU. de 2016.
Sanciones contra Pekín por comprar armas rusas
Asimismo, el comunicado del Departamento de Estado informa que el secretario de Estado "ha impuesto sanciones" contra oficiales militares de un departamento de la Comisión Militar Central de China, órgano supremo de dirección militar chino, por "estar involucrados en transacciones significativas con Rosoboronexport", el consorcio ruso especializado en exportaciones de armamentos y materiales de defensa.
El documento precisa que estas transacciones incluían la compra por parte de China de 10 aviones de combate SU-35 en 2017 y de sistemas antiaéreos S-400 en 2018 en violación de un amplio proyecto de ley de sanciones de Estados Unidos promulgado en 2017.
Las sanciones también impiden que la agencia china solicite licencias de exportación y participe en transacciones de divisas en jurisdicciones de Estados Unidos.
La medida contra los militares chinos se produce en medio de una escalada de la guerra comercial entre ambos países. Esta semana, Washington anunció aranceles de importación a productos chinos por un valor de 200.000 millones de dólares, y Pekín respondió con el anuncio de aranceles de represalia contra Estados Unidos, que afectarán a mercancías por un valor de 60.000 millones de dólares a partir del próximo 24 de septiembre.
La analista internacional Alejandra Loucau opina que Washington teme la competencia en el mercado de las armas y por eso presiona a China, la India y otros países para que no cooperen con Rusia. "Creo que tener que recurrir a las sanciones en vez de utilizar el libre comercio, como lo utilizó EE.UU. antaño, habla de una debilidad que tiene en términos de influencia sobre la región oriental del planeta", ha comentado Loucau a RT.