La Policía del municipio mexicano de Acapulco fue desarmada por el Ejército y la Marina de México, luego de que hubiera sospechas de infiltración de grupos delictivos.
La información fue dada a conocer por el Grupo de Coordinación Guerrero, órgano encargado de la procuración de Justicia en el estado, que también informó que fue destituido un director de la Policía local al que se le hallaron distintas armas de las cuales no pudo acreditar la procedencia.