En Noruega, a la edad de 99 años, murió Joachim Roenneberg, quien lideró la operación Gunnerside para frustrar las ambiciones nucleares de la Alemania nazi, informa Reuters, citando al Gobierno del país nórdico.
Roenneberg nació en 1919 en la ciudad noruega de Alesund. En 1940, cuando Hitler ocupó Noruega, huyó al Reino Unido y se convirtió en miembro de la Resistencia. Después de un entrenamiento militar, regresó a su país natal y participó en varias operaciones especiales contra los nazis.
En 1943, los británicos le encargaron que preparara una operación para explotar la planta Vemork para la producción de agua pesada (óxido de deuterio). Los aliados temían que los nazis pudieran usar agua pesada para desarrollar armas nucleares y por lo tanto decidieron destruir la fábrica en Noruega. El primer intento en 1942 no tuvo éxito, los participantes del grupo de sabotaje fueron asesinados o capturados.
En 1943, Roenneberg y su grupo realizaron un ataque exitoso contra la plata Vemork. Aterrizaron con paracaídas, llegaron a la fábrica en esquís, la explotaron y lograron escapar vivos a la neutral Suecia.
La operación Gunnerside fue realizada sin un solo disparo.
Posteriormente, Roenneberg reveló que a último momento decidió acortar el cable de encendido para que las explosiones comenzaran no en cuestión de unos minutos, sino de unos segundos, y que los nazis no tuvieran tiempo para evitar el sabotaje.
Los historiadores modernos dudan de que Alemania tuviera capacidad de crear una bomba nuclear en aquel momento. Sin embargo, en 1943 era más difícil evaluar las posibilidades de ese escenario.