El expresidente ecuatoriano Rafael Correa (2007-2017) ha sido llamado a juicio este miércoles por Daniella Camacho, jueza de Garantías Penales de la Corte Nacional de Justicia del país (CNJ), en el marco del secuestro del exasambleísta Fernando Balda.
Según informa El Universo, el exmandatario, así como el exsecretario nacional de Inteligencia Pablo Romero y otros dos exagentes, se enfrentan al delito de plagio por el llamado 'caso Balda'.
Para los dos primeros, no obstante, la etapa de juicio ha sido suspendida a causa de que se encuentran fuera del país. Correa reside en Bélgica con su familia desde el año pasado, mientras que Romero se encuentra en España.
Trascendió que el expresidente será juzgado por secuestro pero no por el delito de asociación ilícita, que fue excluido del caso.
"Farsa y persecución política"
Correa, que previamente había denunciado el caso como un ejemplo de 'lawfare' o judicialización de la política en Ecuador, reaccionó a la decisión judicial reiterando que el caso es una "farsa" y que detrás suyo hay una "persecución política".
Durante el anuncio de Camacho, decenas de personas se habían congregado en las afueras de la CNJ en apoyo al expresidente.
El secuestro de Balda
En julio de este año, Camacho había ordenado la prisión preventiva contra Correa en el marco de la investigación por su presunta implicación en el caso del secuestro de Balda, ocurrido en 2012 en Bogotá (Colombia).
Balda es un político ecuatoriano que se unió en 2006 a las filas de Alianza PAIS, partido fundado por Correa. Pero en 2008, por desacuerdos con la agrupación política, se separó y se alió al Partido Sociedad Patriótica (PSP), férreo opositor al gobierno del exmandatario.
El 13 de agosto de 2012, el político ecuatoriano fue raptado en el norte de la capital colombiana, un secuestro que duró cerca de una hora gracias a la intervención inmediata de la Policía. Balda responsabilizó de este acto a Correa, entonces jefe de Estado de Ecuador.
Balda, no obstante, había sido condenado en 2010 a dos años de prisión por el delito de injuria no calumniosa grave, momento en que ya se encontraba en Bogotá. Colombia deportó al político dos meses después del rapto fallido, y en Ecuador fue apresado para cumplir su condena pendiente.
Una vez se produjo el cambio de gobierno en Ecuador en 2017, y Correa entregó el mandato a Lenín Moreno, el tema comenzó a llenar los espacios de los medios de comunicación —a pesar de que el caso ya había prescrito en agosto de 2017—, lo que desembocó en el actual proceso judicial.