Riad y la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) están planeando reducir la producción de crudo, pero intentarán hacerlo de una manera que no contraríe al presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
La estrategia para frenar la caída de los precios sin "aumentar la ira" de líder norteamericano, implica que Arabia Saudita, principal productor de la OPEP, reduzca su extracciones en hasta 1 millón de barriles por día, según explicaron miembros de la organización y fuentes sauditas a The Wall Street Journal.
"La solución que está considerando el cártel de productores es un recorte de producción que no lo parezca", destaca la publicación.
La iniciativa obedece a la posibilidad de que el mercado petrolero tenga un suministro excesivo el próximo año debido a que los precios del crudo se han desplomado más del 30 % desde el mes pasado.
La oferta global se contrajo menos de lo que la OPEP anticipó cuando comenzó a aumentar la producción. Riad, en particular, incrementó sus extracciones para compensar la caída prevista en los suministros iraníes.
La OPEP y Arabia Saudita planean reafirmar los objetivos de producción que acordaron por primera vez en noviembre de 2016. Eso significa que Arabia Saudita comenzará a reducir su producción de su objetivo de 11 millones de barriles por día de este mes hasta el nivel de su cuota de 2016, de poco más de 10 millones de barriles por día, concluye el artículo del diario financiero.