La Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) ha aceptado la solicitud del equipo Boca Juniors de suspender el partido contra el River Plate por la final de la Copa Libertadores de América.
Previamente, el cuadro xeneize había divulgado un comunicado en el que solicitó formalmente la suspensión, alegando que el juego de este 25 de noviembre no se produce en "condiciones de igualdad".
De acuerdo con el presidente de Conmebol, Alejandro Domínguez, la solicitud de Boca es válida. "No hay igualdad de condiciones. Hay un equipo que fue agredido", indicó Domínguez en declaraciones a Fox Sports.
"Es una vergüenza que estemos hablando de esta situación por unos inadaptados, es una vergüenza la imagen que se ha mandado al mundo. Esto no es lo que queremos", añadió el presidente de Conmebol, afirmando que la culpa no es de la confederación.
Según Domínguez, se coordinará con los presidentes de ambos clubes argentinos para programar una nueva fecha. Reportes no confirmados señalan que el encuentro se podría jugar el próximo 8 de diciembre.
Por su parte, el director técnico de Boca Juniors, Guillermo Barros Schelotto y el presidente del equipo, Daniel Angelici, han comparecido en rueda de prensa comentando la postergación del encuentro.
La final inicialmente había sido agendada para este sábado, pero se pospuso para hoy a causa de unos fuertes disturbios en Buenos Aires en los que el bus del equipo de Boca Juniors fue atacado con piedras.