El fundador del portal de revelaciones WikiLeaks, Julian Assange, ha renunciado voluntariamente al gato que desde hace dos años vive con él en la embajada ecuatoriana en Londres, donde permanece asilado desde 2012, según ha informado la activista Hanna Jonasson.
El mes pasado la plantilla diplomática de la embajada compuso un reglamento de conducta para el periodista refugiado que, entre otras condiciones, le obligaba a alimentar a su mascota y realizar la limpieza del mismo, amenazando con entregar el animal a un asilo.
"Indignado por la amenaza, pidió a sus abogados que llevaran a su gato a un lugar seguro. Ahora el gato está con la familia de Assange. Se reunirán en libertad", escribió Jonasson, redactora de la web Justice for Assange, en Twitter.
Assange lleva más de seis años en la embajada de Ecuador en Londres para evitar su extradición a las autoridades suecas y, previsiblemente, a EE.UU., donde ha sido investigado por revelar datos secretos del país.
En mayo de 2016 el australiano adquirió el gato, que ha gozado de popularidad por también tener una cuenta en Twitter.