Lucas Léger, periodista de RT Francia, se convirtió en una "víctima colateral" cuando las fuerzas de la policía antidisturbios trataban de dispersar a los manifestantes que participaron en la movilización en contra de la subida del precio del combustible este sábado en la capital francesa.
Léger contó que siguió a uno de los grupos de manifestantes que querían volverse a los Campos Elíseos y fue herido por una granada de gas lacrimógeno en la mandíbula tras llegar a la plaza Charles de Gaulle.
El periodista no vio quién lanzó la granada, pero estima que provino desde el lado de las fuerzas de seguridad. "La granada llegó desde la dirección donde estaban las fuerzas de seguridad", subrayó. Al mismo tiempo, Léger narró que "el golpe fue muy fuerte", lo que lo hizo pensar que la granada no había sido lanzada a mano. "No vi el momento del lanzamiento, así que no lo sé", expresó.
Según Léger, podrían haber visto que era un periodista, y de hecho, la misma mañana las fuerzas de seguridad "entendieron fácilmente" que era un periodista: "No me registraron ni una sola vez, no me pararon". Por otra parte, el corresponsal admite que lo "podrían haber tomado por un manifestante que llevaba equipos y que grababa videos". "En una situación así, todo es complicado", sostuvo.
El periodista señaló que solo fue un accidente. "No creo que la Policía me haya herido deliberadamente. Pienso que en ese momento simplemente había disparos por todas partes", agregó.
Cerca de 110 personas han resultado heridas —entre ellas 14 policías— en las protestas de los 'chalecos amarillos', organizadas este sábado en el centro de París (Francia), donde la Policía ha realizado 255 detenciones.
Además, al menos 12 periodistas de RT resultaron heridos mientras cubrían la nueva ronda de protestas, según informó la directora del grupo RT, Margarita Simonián.
Las manifestaciones a gran escala de los 'chalecos amarillos' contra el aumento de los precios del combustible comenzaron el 17 de noviembre.