El Partido Socialista Obrero Español de Andalucía (PSOE-A) se ha impuesto en las elecciones de Andalucía, la región más poblada de España, con el 27,9% de los votos (33 escaños), un pobre resultado que podría dar la llave del Gobierno andaluz a las fuerzas conservadoras por primera vez en la historia de la reciente democracia española.
Este resultado, el peor del PSOE en Andalucía, comunidad autónoma donde siempre ha gobernado, abre la puerta a una posible alianza del PP, Ciudadanos y Vox, que han conseguido un 20,8%, un 18,3% y el 11%, respectivamente. Una eventual alianza de las tres formaciones de derecha les permitiría sumar 59 escaños, cuatro por encima de la mayoría absoluta.
Por su parte, el partido Adelante Andalucía (AA) consiguió el 16,2% de los votos, que se traducen en 17 escaños. El partido de extrema derecha Vox, fundado en 2013 y hasta ahora sin representación parlamentaria, es la gran sorpresa de estas elecciones, al lograr 12 escaños.
Mientras, Ciudadanos (CS) ha experimentado un enorme crecimiento pasando de los 9 a los 21 escaños, mientras que el PP ha perdido 7 diputados en esta comunidad autónoma.
Según los datos oficiales, la participación ha sido del 58,65%, cinco puntos menos respecto a las últimas elecciones de Andalucía, dato que ha perjudicado notablemente al PSOE-A, sobre todo en provincias como Sevilla o Jaén, tradicionalmente socialistas.
Tras conocerse los resultados oficiales, la candidata del PSOE-A, Susana Díaz, ha anunciado que a partir de mañana dialogará con el resto de formaciones para tratar de "evitar que la extrema derecha sea quien decida el gobierno de Andalucía", informa Europa Press. Asimismo, reconoció que el resultado de estos comicios demuestran un "retroceso real de la izquierda" en esta comunidad autónoma.
¿Punto de inflexión en la política española?
Las encuestas daban una victoria holgada al partido socialista, liderado por Susana Díaz, si bien pronosticaban que no llegarían a la mayoría absoluta, como sucedió en las últimas elecciones, en las que el PSOE obtuvo 47 escaños.
Las elecciones andaluzas son vitales en el panorama político español al tratarse de un termómetro clave para medir qué puede pasar en las próximas citas electorales que se avecinan: las municipales de 2019 y las generales que podrían tener lugar ese mismo año.
Esta Comunidad Autónoma es uno de los feudos tradicionales del partido socialista, donde gobierna ininterrumpidamente desde 1982. Siempre se ha considerado que la pérdida de influencia en esta región alejaba al PSOE de La Moncloa.
Esta convocatoria electoral es la primera que afronta como presidente el líder socialista Pedro Sánchez, tras la moción de censura contra Mariano Rajoy (PP), que lo llevó a la Presidencia el pasado mes de junio. Este mal resultado del PSOE en las andaluzas podría trastabillar su legislatura, que se sostiene con el apoyo de Podemos y otras formaciones, lo que podría llevar a un adelanto electoral a nivel nacional, según analistas.
El politólogo Eduardo Bayón considera que la irrupción de la extrema derecha en Andalucía se debe a la "desafección política de gran parte del electorado". El experto además considera que con estos resultados Vox exhibe "la capacidad de la extrema derecha para influir en el debate político y marcar la agenda política de España".