Costa Rica implementa un innovador proyecto de reciclaje con una moneda virtual medioambiental
En un país con una imagen mundial de nación verde como es Costa Rica, se ha implementado un innovador proyecto que incentiva a la población a gestionar adecuadamente los desechos devolviéndoles algo a cambio. Bajo ese concepto nació Ecolones, una especie de moneda virtual con la que se retribuye a las personas por los desechos reciclables.
Tras pocos meses, la iniciativa está teniendo cada vez más acogida entre los costarricenses, ya que con los ecolones un usuario puede obtener descuentos en productos y servicios de diferentes tiendas y establecimientos. Por cada artículo reciclable que una persona entregue en un centro de acopio recibe una cantidad determinada de ecolones, los cuales se van acumulando en una billetera virtual. Por ejemplo, por una botella de plástico un usuario obtiene 4 ecolones.
"Nosotros estamos educando a la población de que reciclar no es solamente un tema de ayuda al ambiente, es un tema que implica la parte económica. ¿Por qué? Porque cada vez que tomamos esos valorizables y no le damos una adecuada disposición, lo que estamos es enterrando literalmente materia prima que puede usarse en una economía circular", explica la subdirectora del proyecto Ecolones, Lucila Espinoza.
La nación centroamericana posee una larga experiencia en políticas medioambientales, la mayoría de ellas con apoyo gubernamental. Los parques nacionales y zonas protegidas cubren el 25% del territorio nacional. En el 2017, más del 99% de la electricidad que se generó en el país provino de fuentes limpias: volcanes, aire, biomasa, ríos y sol.
Costa Rica es un paradigma internacional en lo que a inversiones en fuentes renovables de energía se refiere. El propio presidente del país, Carlos Alvarado, ha dicho que luchará fuertemente para lograr la total descarbonización de la nación en los próximos años. Según el mandatario, el gran reto ahora está en las calles. El intenso tráfico es sinónimo de mucha contaminación.
"Teniendo esta base firme de energías limpias y renovables, si transformamos nuestro transporte de uno de diésel y gasolina, a uno de electricidad, biocombustible u otro tipo de modalidad de transporte más limpio, podemos reducir y descarbonizar nuestra economía, con un impacto muy positivo para el mundo en temas de cambio climático", afirma el mandatario.
Las políticas estatales, el aporte de la población y las riquezas naturales han permitido a Costa Rica fijar una ambiciosa meta para el bicentenario de su independencia. En el 2021 la nación aspira a convertirse en el primer país en Latinoamérica con una matriz energética 100% verde.