Científicos revelan los ingredientes del mortífero cóctel que desata los tornados de fuego

El tornado de fuego desatado durante el incendio Carr, que este verano afectó el norte de California (EE.UU.), fue el producto de una combinación de altas temperaturas, vientos erráticos y unanube que se elevó en la atmósfera a la altura de casi 12 kilómetros, según un estudio publicado en Geophysical Research Letters.

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El remolino, que adquirió el tamaño de tres campos de fútbol, se formó el pasado 26 de julio de la misma manera que un tornado normal. Causó la muerte de un bombero.

Ese día una nube generada por el fuego —y que contenía hielo en su parte superior— creció rápidamente, duplicando su tamaño en solo un cuarto de hora. Según el estudio, en esa ocasión se registraron vientos con fuerza de tornado que alcanzaron 230 kilómetros por hora.

Otros factores que contribuyeron a afianzar la potencia del remolino del fuego incluyeron una baja humedad y una zona ciclónica de cizalladura o cortante del viento cerca de la superficie, recoge el trabajo. La cizalladura se produce cuando la velocidad o la dirección del aire cambia repentinamente, de modo que puede soplar en dos direcciones opuestas y todo esto en un espacio reducido.

Este es el segundo tornado de fuego documentado. El primero fue registrado en 2003 en Australia, recuerda la cadena televisiva estadounidense KRCR.