Un equipo de biólogos del grupo de conservación y ecoturismo Tropical Herping se ha vuelto a topar con un ejemplar de una rara especie de ranas, cuya presencia en Ecuador fue documentada por última vez en 2005. La rana marsupial cornuda Gastrotheca cornuta ha sido vista en la selva tropical de Chocó, al oeste del país, concretamente en el entorno de la reserva ecológica de Cotacachi-Cayapas.
Los biólogos la descubrieron por el brillo de sus ojos, al escuchar el croar desconocido y apuntar sus linternas a las hojas de una palmera. Sebastián Di Doménico, miembro del equipo, comentó a The National Geographic que estaban tan emocionados que empezaron a dar literalmente saltos de alegría.
Los biólogos recogieron cuatro ranas Gastrotheca cornuta, entre ellas, una hembra embarazada, indicio de que la selva aún cuenta con una población estable. La especie figura en la Lista Roja de Especies Amenazadas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) y está en peligro de extinción. Antes la encontraban también en Colombia, Panamá y Costa Rica.
Las ranas Gastrotheca cornuta son anfibios nocturnos que habitan en los árboles y son más destacados por su forma de reproducción, que se asemeja a la de los canguros. Las madres desarrollan los huevos en una bolsa en la espalda, de la que nacen ya ranitas totalmente desarrolladas.
Su hábitat natural en Ecuador –una parcela de la selva prácticamente intacta– puede acabar en manos de empresas madereras o productoras de aceite de palma, que tienen en la mira estos territorios, y los ecólogos recaudan fondos mediante la iniciativa Save the Chocó para comprar el terreno y salvar a las especies que allí moran.