China ha probado con éxito el sistema de misiles antiaéreos más avanzado de Rusia, el S-400, lo que pone de relieve la intensificación de la cooperación entre ambos países, según South China Morning Post.
Según el medio, los misiles antiaéreos de largo alcance del nuevo sistema cumplieron con éxito la tarea de alcanzar un objetivo, cubriendo una distancia de casi 250 kilómetros y a una velocidad de 3 kilómetros por segundo, en el marco de un ejercicio efectuado a primeros de diciembre. China cuenta con la versión anterior de este sistema de defensa, el S-300, desde los años 90 y es el primer país que del mundo importa los S-400.
"A pesar de la presión de Estados Unidos, el Ejército ruso aumentará su cooperación con el Ejército Popular de Liberación de China en áreas como misiles, construcción naval y otros sectores", comenta Li Jie, experto militar de Pekín citado por el medio.
La prueba tuvo lugar en medio de las inquietudes de Washington ante el desarrollo de la cooperación militar entre Pekín y Moscú. Según el informe oficial de la Contraloría General estadounidense, publicado este mes, "China y Rusia están buscando obtener armas hipersónicas porque su velocidad, altitud y maniobrabilidad pueden anular a la mayoría de los sistemas de defensa de misiles" y "no hay contramedidas existentes"
- Rusia ya ha cerrado contratos de compraventa de sus avanzados sistemas de misiles de defensa aérea S-400 con China, la India y Turquía.
- Su contrato de 2.500 millones de dólares con Turquía fue certificado en diciembre de 2017, aunque tres años antes China se convirtió en la primera nación extranjera que adquirió ese armamento por unos 3.000 millones de dólares.
- El contrato para el suministro de los sistemas S-400 ruso-indio fue firmado el pasado 5 de octubre. El acuerdo no prevé pagos en dólares estadounidenses, sino que se efectuará mediante divisas nacionales de ambos países.